jueves, 3 de julio de 2008

QUÉ OJOS LO VIERON VENIR CON LAS NUBES

Por. Reynaldo Estrada
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1. Leemos en Apocalipsis 1:7 “He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén”
2. El apóstol Juan fue guardado por Dios en medio de la gran tribulación del primer siglo, para que escribiera la carta del Apocalipsis y para alentar a las 7 iglesias del Asia menor, donde Juan fue coparticipe según (Apocalipsis 1:9) de ellos en la misma persecución y gran tribulación de aquellos días que se dio con el cumplimiento de la caída del templo y la destrucción de la ciudad de Jerusalén en la guerra del año 66 al año 73 d.C.
3. Si el Apocalipsis hubiera sido dado a las 7 iglesias después de esta destrucción del año 70 d.C., entonces, tendríamos que buscar la caída de del templo y de Jerusalén después del 70 para conocer el significado y el cumplimiento y la historia registra que no hubo destrucción después del año 70 d.C.
4. El Señor Jesús ya le había confirmado a Juan que vería su venida. En Juan 21:20-23 cuando Pedro, dijo a Jesús refiriéndose a Juan, dijo a Jesús. Señor, ¿Y qué de éste? Jesús le dijo: “Si quiero que él quede hasta que yo venga, ¿Qué a ti?. El texto dice que entre ellos se extendió el dicho “de que aquel Juan no moriría”.
5. El Apocalipsis tuvo que ser escrito por Juan antes del año 70 d.C. porque describe el gran juicio final de Dios contra la gran ramera Israel dónde el Señor según Apocalipsis 11:8 fue crucificado en la grande ciudad que Apocalipsis 14:8 confirma como Babilonia la grande ciudad que ha caído.
6. En la época en que Juan escribe a Jerusalén se le compara con Sodoma y con Egipto, ambas conocidas por su maldad, fue destruida por los romanos en el año 70 d.C., y las legiones romanas a filo de espada exterminado más de un millón de judíos y se habían llevado a Roma los tesoros del templo.
7. Jerusalén, fue la misma ciudad pagana que según Mateo 23:34,35 habían matado a los profetas de Dios. Según Apocalipsis 17:6 Juan vio a Jerusalén (o mujer) ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y Juan quedó asombrado con gran asombro.
8. El propósito de todo este juicio apocalíptico fue para confirmar el cumplimiento de todas las cosas, Lucas 21:22 dice que la gran tribulación fue días de retribución para que se cumplieran todas las cosas escritas, y Apocalipsis 21:6 para que se escribiera el “hecho está”. Algo no puede cerrarse con “hecho está” si todavía no se ha cumplido o consumado.
9. El Apocalipsis describe la transición del cambio de pacto. Dios siempre juzgó a otros gobiernos y naciones paganas del antiguo testamento y por la misma maldad ahora en el año 70 juzga a Jerusalén y al gobierno del judaísmo que fueron los protagonistas del paganismo siendo Israel su esposa.
10. Dios en ese juicio le dio carta de divorcio terminando definitivamente con el viejo pacto, viejo gobierno, viejo era, para casarse con la iglesia. Aquella generación del año 30 al año 70 d.C. vivió ese cambio de pacto en juicio y por juicio, y ya el Señor Jesús en Mateo 24:34 se los había predicho cuando les dijo: “No pasará esta generación hasta que todo esto acontezca”. En el 70 Dios le dio carta de divorcio a Israel terminando con el viejo pacto que hizo con esa nación.
11. A partir del juicio del 70, Dios se casó con la asamblea Dios en todos que es la iglesia nueva Jerusalén, la celestial, la que no tiene nada que ver con pactos ni viejo ni antiguo, porque está bajo el gobierno del amor incondicional, sin pactos ni condiciones.
12. Ahora, el Señor Jesús en Mateo 23:38,39 relacionó su venida con la casa dejada desierta, donde acusa a los escribas y fariseos por última vez para que se arrepientan de su maldad y de su apariencia religiosa, y les dice “desde ahora no me veréis, hasta que digáis: Bendito el que viene en el nombre del Señor”. ¿Qué les quiso decir? Que pronto moriría, y que no le volverían a ver sino en juicio donde su casa sería dejada desierta, pues, Mateo 24:1,2 dice claramente que “no quedaría de esa casa piedra sobre piedra”.
13. Ante todo esto, la reacción lógica de Sus discípulos fue preguntar en Mateo 24:3 ¿Cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo?. Observa que aquí hay tres eventos colocados por Mateo como parte de un mismo acontecimiento simultaneo.
14. Todo judío, escriba y fariseo sabía que el fin de la era del judaísmo vendría acompañado de juicio. Como el Señor nunca deja nada al aire y sin respuesta a partir de Mateo 24:4 en adelante, les habla de varias señales para que no estén durante esos 40 años de generación desprevenidos y así pueda salvarse de la persecución que se acercaba, pues, ya estaba en acción “los dolores de parto” de una nueva era en función.
15. Ninguna de esas señales pasarían después de aquella generación de 40 años. Todas esas señales tuvieron su cumplimiento dentro del marco y límite de esa generación mala y perversa. La segunda venida de Cristo fue incluida por el mismo Señor entre esas señales y según Mateo 24:30 fue la señal del Hijo del Hombre, “Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria”.
16. ¿Fue la venida de Cristo personal y visible?: En Mateo 24:24 Jesús les advirtió a Sus discípulos que no se dejaran engañar cuando alguien les dijera. “Mirad, aquí está el Cristo…no le creáis”. En el V:27 les compara su venida como el relámpago que sale y se muestra del oriente hasta el occidente. Un relámpago es un destello luminoso de décimas de segundos. Entonces, su venida personal y visible todo ojo no le pudo ver en décimas de segundo.
17. Con la descripción del relámpago, los discípulos quedaron convencidos que sería una falsedad que alguien les mostrará personal y visiblemente a Cristo, ya que su venida sería casi imperceptible debido a la comparación con el relámpago.
18. ¿Por qué Apocalipsis 1:7 dice “He aquí viene con las nubes, y todo ojo le verá…”? En Mateo 24:30 que es el mismo tema de Apocalipsis 1:7 el Señor Jesús cita a Daniel 7:13-14 que dice: “…he aquí con las nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre…y le fue dado dominio, gloria y reino…que nunca pasará, y su reino uno que no será destruido”.
19. Observa que Jesús prefirió en Mateo 24:30 autodenominarse “Hijo de hombre” pensando en Daniel 7:13, pues, el profeta lo describe “tomando el reino”. Daniel ve al Hijo del Hombre con las nubes del cielo, y no lo ve de camino a la tierra, sino que lo ve yendo hasta el Anciano de Días. Fíjate, que la expresión en Daniel 7:13 “con las nubes del cielo” describe a Jesús recibiendo el reino del Anciano de Días y después según el V:18,22, 27 lo recibieron los santos.
20. Fíjate, que es después del cumplimiento de su segunda venida que el reino de Dios es eterno y lo reciben los santos, ya que según Daniel 7:27 el reino, el dominio y la majestad de los reinos debajo del todo el cielo, sea dado al pueblo de los santos del Altísimo. Si Cristo todavía aun no ha venido, entonces, no existe debajo del cielo ningún reino eterno de Dios y el reino de Dios no es fisiográfico sino espiritual, celestial y eterno.
21. La venida en las nubes está asociada con el ejercicio de la soberanía de Dios en juicio contra sus enemigos en las naciones. Génesis 11:5-7 “Jehová descendió para ver la ciudad y la torre…descendamos…”. Éxodo 3:8 “he descendido para librarlos de manos de los egipcios…”. Nehemías 9:13 “Sobre el monte Sinaí descendiste…”. Isaías 19:1 “Jehová monta sobre una ligera nube…y entrará en Egipto…”. Isaías 31:4 “Jehová de los ejércitos descenderá a pelear sobre el monte de Sion…”. Miqueas 1:3.4 “Jehová sale de su lugar, y descenderá…”. Nahum 1:3 “Jehová marcha y las nubes son el polvo de sus pies”.
22. ¡Te das cuenta! Dios vino en nubes muchas veces a la tierra sin que nadie lo viera personal ni visiblemente. El vino en juicio sobre muchas naciones del antiguo testamento y ahora, en el año 70 con las descripciones de Jesús en Mateo 26:64 “veréis al Hijo del Hombre…viniendo en las nubes del cielo”. Marcos 14:62 “Yo soy; y veréis al Hijo del Hombre…viniendo en las nubes del cielo”. Apocalipsis 1:7 “he aquí viene con las nubes y todo ojo le verá…”. Apocalipsis 14:14 “He aquí una nube blanca y sobre la nube uno sentado semejante al Hijo del Hombre…y en la mano tenía una hoz aguda”, es una clara descripción de juicio inminente sobre la nación de Israel, juicio que cayó en el año 70 siendo los instrumentos de ese juicio personal y visible Tito y las legiones romanas.
23. Entonces, la expresión “viniendo en las nubes” fue escrita por los profetas, por Jesús y por Juan para describir la ejecución de un severo juicio donde Israel sería la nación sobre la cual Dios lo ejecutó en el año 70 d.C. de nuestra historia.
24. Ese juicio del 70 todo ojo lo vio en aquella generación. Leemos en Apocalipsis 1:7 “He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén”. Apocalipsis 22:20 dice “El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús”. Entonces, venir con las nubes, ver con el ojo y lamentar con la boca es el drama de un juicio inminente. Cristo no vino personal ni visiblemente a la tierra por segunda vez, vino en juicio sobre la gran ramera Israel y la juzgó para entregarles según Mateo 21:43 el reino de Dios a ellos y dárselos a otros que produjeran los frutos de él y esto es lo que estamos haciendo después del año 70 d.C.
25. La expresión todo ojo le verá fue un indicador de que no quedó nada por fuera sin verse. El ojo de todos los que a Cristo le traspasaron vio el juicio sobre el templo, sobre la nación de Israel, sobre el judaísmo y sobre la ciudad de Jerusalén.
26. La expresión y los que le traspasaron fueron las tribus de Israel que al ver ese juicio lo lamentaron en medio, durante o después de la destrucción total del templo y de Jerusalén, pues, según Lucas 21:24 muchos judíos serían llevados cautivos a todas las naciones del territorio romano. Ellos vieron la segunda venida de Cristo que es lo que se conoció como la caída del templo y la destrucción de Jerusalén.
27. El lamento de los que le traspasaron estaba profetizado en Zacarías 12:10 “…Y miraran a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por el hijo unigénito…afligiéndose…”. Juan 19:37 dice “Mirarán al que traspasaron”. El llorar como se llora por el hijo unigénito, se cumplió en el año 70 cuando se manifestó desde el cielo la ira de Dios sobre Jerusalén.
28. La casa de David y los habitantes de Jerusalén se lamentaron cuando se dieron cuenta que crucificaron a su Rey Mesías. Todos los linajes de la tierra que hicieron lamentación por Jesús, fueron aquellos varones Israelitas que moraron un día en Jerusalén de todas las naciones bajo el cielo (Hechos 2:5). Ellos, fueron según Hechos 2:36 toda la casa de Israel que crucificaron a Jesús.
29. Los judíos mismos pidieron ese juicio y esa ira de Dios, cuando en Mateo 27:25 dijeron: Su sangre sea sobre nosotros y sobre nuestros hijos. Es allí, donde según Zacarías 12:12-14 todos los linajes de la tierra se lamentaron.
30. Tenemos que el profeta del antiguo testamento y el apóstol último del nuevo testamento vieron a cada linaje de la tierra lamentándose por Jesús. Un linaje comporta una tribu y todas las personas descendientes de alguna de las 12 tribus de Israel fue un linaje. Jesús dijo en Mateo 24:30 que a la aparición del Hijo del Hombre, todas las tribus de la tierra harían lamentación al verle venir sobre las nubes del cielo.
31. La expresión lamentar es del griego cortar, abrumar. Esto fue lo que le sucedió a los judíos por faltar al pacto, por ser ramera, por crucificar al Rey Mesías, fueron juzgados, cortados por Jesús en su segunda venida por la multitud de sus pecados en su conducta no arrepentida.
32. En Hechos 1:9-11 leemos “viéndolo ellos, fue alzado, y le recibió una nube que le ocultó de sus ojos…este mismo Jesús que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo”. Durante 40 días el Cristo resucitado estuvo apareciéndose a sus discípulos y hablándoles del reino de Dios. Como él no podía permanecer mucho tiempo con ese cuerpo en la tierra, porque era de otra dimensión, Cristo les da las últimas instrucciones a sus discípulos de lo que debían hacer. Entonces, fue alzado y una nube lo ocultó de sus ojos.
33. En ese proceso de ascendencia, dos ángeles le dijeron: “Así vendrá como le habéis visto ir al cielo”. Fíjate, que Hechos 1:9-11 no dice CUANDO vendría, pero si nos dice CÓMO vendría.
34. En Apocalipsis 19:11-16 leemos que Juan ve al VERBO DE DIOS montado en un caballo blanco y con justicia juzga y pelea, y vio también a los ejércitos celestiales, que le seguían en caballos blancos. De su boca sale una espada aguda para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y el pisar el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso, y su nombre es REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES”. Vemos aquí en Apocalipsis 19 como Juan recrea la segunda venida de manera alegórica para dar juicio a Jerusalén.
35. Vemos entre Hechos 1:9-11 y Apocalipsis 19:11-16 una clara diferencias en sus detalles acerca de la segunda venida de Cristo. En Hechos 1 Jesús no se fue rodeado de gloria y toda la humanidad no le vio irse. Pero, ¿Acaso no dice Hechos 1:9-11 que de la misma forma en que se fue, así vendría? Hechos 1 no dice que a Jesús le vio irse “todo ojo”, sino unos cuántos discípulos.
36. Entonces, si pocos discípulos le vieron irse, pocos discípulos le vieron volver. Jesús lo dijo en Mateo 16:28 “De cierto que hay algunos de vosotros de los que están aquí, que no gustarán la muerte, hasta que hayan vistos al Hijo del Hombre viniendo en Su reino”.
37. Hay ojos que no tienen nada que ver con una experiencia física, por ejemplo leemos en Lucas10:23-24: "Y volviéndose a los discípulos, les dijo aparte: Bienaventurados los ojos que ven lo que vosotros veis; 24porque os digo que muchos profetas y reyes desearon ver lo que vosotros veis, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron.". Leemos en Efesios 1:17-18: "para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él, 18alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos". ¡Te das cuenta! Aquí en estas dos citas, el ojo no tiene nada que ver con una experiencia física, sino con el entendimiento, porque el ojo que se habla aquí en estas dos citas, es el ojo del entendimiento, porque indica una forma de hablar, una expresión idiomática, porque así se entendía en el lenguaje de los que hablan el hebreo.
38. Nosotros, vemos a Cristo ahora, por el ojo del entendimiento y no tenemos que esperar la muerte para poder verlo. Lo vemos cara a cara, es decir íntimamente, relacionalmente. Por eso, los futuristas te quieren hacer ver un “rapto” con tus sentidos físicos, o a esperar a un Cristo en el mismo cuerpo con el que ascendió al cielo hace dos mil años en Hechos 1:9-11.
39. La gran decepción de casi el 90% de los cristianos en las iglesias del mundo, es que sus líderes les han hecho creer y esperar oír Su voz, ver con sus ojos físicos a un Cristo físico. Pero el ojo con el que contemplamos a Dios es con el ojo del entendimiento espiritual.
40. Hay la tendencia de querer descubrir cómo será la vida después de la muerte. Es un deseo impuesto por las cosas naturales y carnales. Pero el enfoque del conocimiento del Nuevo Testamento es sobre la vida presente, cómo debemos vivir y qué debemos comprender en nuestro estado presente.
41. Leemos en Romanos 15:20-21: "Y de esta manera me esforcé a predicar el evangelio, no donde Cristo ya hubiese sido nombrado, para no edificar sobre fundamento ajeno, 21sino, como está escrito: Aquellos a quienes nunca les fue anunciado acerca de él, verán; Y los que nunca han oído de él, entenderán. ¿Cómo se ve a Cristo? ¿Cómo se puede oír de él? Sólo por medio del Evangelio. Los creyentes del primer siglo estaban viendo a través de un vidrio oscuro, pero nosotros, después de conocer la palabra de los cumplimientos, lo vemos abiertamente.
42. Muchos quieren ver a un reino con ojos físicos, cuando Jesús dijo en Juan 18:36 “mi reino no es de este mundo…”. Leemos en Juan 3:3: "Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios", observa que el Señor Jesús vino a restaurar la vista a los ciegos, pero ¿Cuál? Fue la visión o vista espiritual a degenerados que siempre tuvieron ojos cerrados a los asuntos espirituales de Dios.
42. Ciertamente, por demostración de su poder en vida, Jesús sanó a ciegos en la carne, pero su misión fue la sanidad interior y no exterior que fue algo temporal mientras estuvo en los días de su carne obrando demostraciones en lo físico para que estas fueran sombras de las verdades celestiales o espirituales. Existe una ceguera más lúgubre que la física. Y la sanidad espiritual es un milagro de proporciones mucho más grandes que la sanidad del cuerpo. Es absurdo esperar una salud física, cuando hemos experimentado el milagro más grande de todos los tiempos, la sanidad del ojo espiritual para ver a Dios “cara a cara”, es decir, conocer en vida que implica una íntima relación con él.
43. Nadie ha regresado del más allá de la muerte física, para que muchos predicadores sensacionalistas se inventen sueños acerca de “yo fui al infierno y estuve en el tercer cielo”. Pablo en sus días anheló ser revestido de aquella habitación celestial. La Biblia habla poco del más allá o después de la muerte, pero si tiene mucho que enseñar sobre el más acá o la vida actualmente vivimos.
44. El sistema religioso nos ha inclinado sólo a buscar señales. Queremos adivinar la vida venidera, soñar cómo será, guardar la expectativa de ver físicamente a Jesús. Pero ya estamos en El, somos uno con El en vida, naturaleza y eternidad. Ya vi a Dios cara a cara, por el ojo del entendimiento, porque me conozco en él, sé quién soy en él, y sé que vida y eternidad posee en él. Derechos reservados-Nit-800211614-1-Reynaldo Estrada ministries.

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